La Benemérita, Real y Pontificia Asociación Mayor de Historiadores de la Región Lima Metropolitana presenta al Boulton-Paul Defiant, avión de caza inglés clásico de la segunda guerra mundial y ejemplo impertérrito de los niveles a los que puede llegar la estupidez humana.
A primera vista puede parecer un ágil Spitfire o un robusto Hurricane. Sin embargo, hay una crucial diferencia. Mientras que los citados cazas, como cualquier caza sensato de la historia, disparaban hacia adelante, el Defiant disparaba hacia atrás con una torreta. La justificación era que estaba diseñado para derribar bombarderos enemigos, y no para combatir contra otros cazas. Evidentemente, si fuera a luchar contra cazas enemigos tendría que esperar ponerse en una posición vulnerable, es decir, tenerlo en la cola para recién poderle disparar. Ahora, el problema es que para el momento en que fue diseñado los cazas en promedio ya tenían más poder de fuego que las cuatro ametralladoras que tenía el Defiant.
El Defiant fue tan, pero tan malo, que servía para poco más que hacer que los cazas alemanes gastaran munición. Y en un momento de extrema crisis, como lo fue la batalla de Inglaterra, cuando los ingleses necesitaban todos los aviones a los que pudieran echar mano, simplemente tuvieron que retirar a esta tontería voladora de la batalla. Idiotas.
A primera vista puede parecer un ágil Spitfire o un robusto Hurricane. Sin embargo, hay una crucial diferencia. Mientras que los citados cazas, como cualquier caza sensato de la historia, disparaban hacia adelante, el Defiant disparaba hacia atrás con una torreta. La justificación era que estaba diseñado para derribar bombarderos enemigos, y no para combatir contra otros cazas. Evidentemente, si fuera a luchar contra cazas enemigos tendría que esperar ponerse en una posición vulnerable, es decir, tenerlo en la cola para recién poderle disparar. Ahora, el problema es que para el momento en que fue diseñado los cazas en promedio ya tenían más poder de fuego que las cuatro ametralladoras que tenía el Defiant.
El Defiant fue tan, pero tan malo, que servía para poco más que hacer que los cazas alemanes gastaran munición. Y en un momento de extrema crisis, como lo fue la batalla de Inglaterra, cuando los ingleses necesitaban todos los aviones a los que pudieran echar mano, simplemente tuvieron que retirar a esta tontería voladora de la batalla. Idiotas.
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